viernes, 25 de julio de 2008

"Un medico llamado Florencio"


A manera de preambulo narraré un día de guardia médica

Un atardecer de verano de hace muchos años viví esta experiencia que jamás podré olvidar. El reloj marcaba la hora diecinueve, el cuerpo extenuado, las manos a causa del agotamiento fisico sufrían calambres, una transpiración fría recorría mi frente, muchas horas de trajín sin descansar, dieciocho, contabilizadas en el servicio de urgencia de un hospital resultan aniquilantes.
Era como si los seres humanos se hubieran puesto de acuerdo para lastimarse, cada uno de los pacientes que ingresaba presentaba una lesión más grave al anterior.

miércoles, 16 de julio de 2008

"ROMANCE DEL COMBATE DE LA CAÑADA DE LA CRUZ"

Extraido del libro escrito por el Profesor Miguel Hangel Gonzalez LA BATALLA DE LA CAÑADA DE LA CRUZ Y EL CONTEXTO SOCIAL POLITICO Y ECONOMICO DEL AÑO 1820. ESCRITO POR EL.

¡Ay!, qué fria la mañana
la mañana amanecía
sobre la vieja cañada
que la neblina acaricia…
¡Ay!, que ya el sol aparece
cual pincelada rojiza
y descubre entre guadales
las patrullas prevenidas;
que del dia veintiséis
el ejército se alista
en la Villa de Luján
donde rige la Justicia
el doctor Santos Quevedo
quien ordena la revista
pues ya Soler, de carrera,
de López y Alvear sabía
cuál era su posición
y cuantas eran sus listas…
(los de Santa Fe, a su vez,
de los porteños, sabían;
que es muy hábil general
el que manda las partidas)
Y ya se acercan las tropas
por el camino a Capilla,
y van llegando los cuerpos
de negros y artillería,
¡qué temor tiene los negros,
que creen en agüerías!...

sábado, 12 de julio de 2008

"Las torres gemelas"


Desperté sobresaltado... ansioso y angustiado... con la percepción de que algo iba a suceder...
Corria el mes de agosto de 2001, era domingo, lo recuerdo muy bien porque mis hijos al igual que otros de la Republica
Argentina se disponian a celebrar el “Dia del Niño”. Una rara sensación de que no iba a resultar un domingo más comenzó a rondar a mi cabeza.
Hace tiempo, como dos años, de que me atormentan sueños.

"Don Enrique Wenceslao Villafañe"

Es verano, el reloj marca la hora 14, estoy siguiendo una fila interminable dentro de una institucuión bancaria. El tiempo parece detenido , no funciona el
aire acondicionado... eso creo ... tengo cefalea ... me duelen los pies ... el cajero va por dos personas y para mi turno faltaba bastante...
Me abanico con papeles, estoy aburrido con tanta espera , estoy contando los billetes que tengo que dejar para verificar nuevamente, de pronto compruebo
que en los mismos en una de sus caras está impresa la figura del General: Julio Argentino Roca.

"Felix y su gato"


Una tarde, sentado en un sillon, leia confortablemente. Mi pequeño hijo Federico jugaba a mi lado con su mascota : un gato al que llama “Cooper”
Aparte los ojos de la lectura y al registrar la escena los pensamientos me llevaron en un vertiginoso retroceso a desandar treinta años de mi vida.

"Mi querido hermano mayor"


1 de mayo de 1982, un día marcado a fuego en cada uno de los integrantes de mi familia.
Recuerdo la agitación de mi madre despertando a cada miembro de la casa : "los ingleses han bombardeado puerto Argentino”...

"Mi querido Samuel"

Recuerdo las tardes de verano... siempre muy cerca de Samuel... procurando que repitiera las mismas historias...
Me encantaba estar a su lado, no me aburría , disfrutaba
cada uno de sus relatos.
Apenas contaba con diez años ... aún añoro la calidez de sus
palabras.

"Nosotros los Argentinos"

Soy un joven Médico “Argentino” que reparte su tiempo entre pacientes, alumnos, dos hijos y una resignada esposa.
Un dìa agitado, como todos para mì, situado en la Capital Federal, mi hogar dista a 100 km. esperaba un colectivo.
Agotado, sin fuerzas, había dictado clase en la Facultad de Medicina, pude
Después de esperar pacientemente en una fila numerosa, abordar uno.
Para completar “La Felicidad” del momento conseguí sentarme.
Dispuesto a disfrutar del asiento, me acomodé y pensé que dormiría plácidamente hasta el final del recorrido.
Tal vez la fatiga intelectual y corporal hizo que el sentido auditivo se intensificara y en vez de abstracción me dedique a oir las conversaciones que mantenían los pasajeros.

"Un angel llamado Virginia"

Enero de 2004, una tarde calurosa estando sentado frente al monitor de la computadora, tenìa problemas con el Servidor del correo elctrònico, llevaba como diez dìas tratando de comunicarme y no podìa lograrlo; tampoco el Servicio tècnico habia localizado la falla; la situaciòn me provocaba enojo y solo hilvanaba uno tras otros rosarios de palabrotas.
Pero ese dìa teniendo paralizados mis dedos por la resignaciòn, algo imprevisto sucediò: sin haber tocado tecla alguna mi servidor electrònico se conectò... En la pantalla apareciò un mensaje... No pude leerlo y estremecido por lo sucedido solo atinè ha cerrar la computadora.
Recien al dìa siguiente pude leer el texto.